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En Caupolicán, S. A. encontrarás justo lo que necesitas y el asesoramiento de grandes especialistas. Una de las preguntas habituales es cómo limpiar el toldo. Un toldo sucio no da una buena imagen, muy al contrario, muestra descuido, y puede llegar a ensuciar el aspecto externo de tu casa u oficina, incluso cuando la fachada esté reciente.
Para limpiar los toldos, recuerda que lo ideal es hacerlo al final de utilizarlos para que permanezca enrollado libre de manchas y su olor permanezca. Lo mejor es lavarlo con una manguera, aprovechando un día de sol en que se pueda secar sin problemas. La propia presión del agua te servirá para eliminar restos incrustados en la tela. Seguramente en tu jardín tendrás sistemas de agua a presión que son ideales para este tipo de labores. La cara interna también debes lavarla, ya que aunque no esté tan expuesta, también acumula manchas.
Para toldos colocados en altura, en un piso por ejemplo, al que no podrás alcanzar con la manguera, puedes emplear un envase con pulverizador con agua y frotar el toldo con un cepillo limpio. Después déjalo desplegado el tiempo suficiente hasta que se pueda secar, si no, podría generar manchas de moho. Si hay mucha suciedad, puedes usar jabón neutro y en casos difíciles, agua con amoniaco, frotando con un cepillo y aclarando con agua después.